Anoche, Juan Manuel “Dinamita” Márquez volvió a
mostrar lo mejor de sí, derrotando al estadounidense Mike “Mile High” Alvarado
por decisión unánime en 12 rounds (117-109, 117-109, 119-108), obteniendo el título internacional Welter OMB. El combate tenía carácter de eliminatorio y
ahora el mexicano tendrá la posibilidad de retar al campeón reinante de la OMB en dicha categoría , Manny “Pacman” Pacquiao.
El primer round fue un verdadero “round de estudio”. Los dos púgiles
midieron con cautela sus movimientos. Sin embargo, pese al análisis del que
hablábamos, Márquez se mostró más activo. Intentó en varias oportunidades abrir
la guardia de Alvarado con su jab izquierdo. Solo una vez pudo filtrar un golpe
claro, en los 20 segundos finales, cuando, tras dicho jab, visitó el rostro del
estadounidense con un recto de derecha que concluyó el viejo y efectivo 1 y 2.
Alvarado se mostró muy preocupado por mantener la guardia en alto, protegiendo
su rostro con mucho interés. Al mexicano le bastó con la actividad que describía
para llevarse la primera vuelta.
El segundo round comenzó con Alvarado buscando a Márquez. Esta
búsqueda, no obstante, no encontró frutos y solo duró 30 segundos. A partir de
allí, el mexicano dominó a placer. Repartió sus golpes a la zona hepática
(incluido un gancho izquierdo de hermosa línea) y conectó con más claridad el
rostro con buenas combinaciones, destacándose con la velocidad de sus ganchos y
un uppercut izquierdo perfecto que hizo saludar hacia el techo a su oponente.
“Mile high” pareció estar reservándose para encontrar desguarnecido a su rival,
y así disparar un bomba, dado que apenas incurrió en ataques que por lo general
fallaba, y entre cada embiste se contaban largos segundos.
El tercer round vio a Juan Manuel cediendo el centro del ring y la
iniciativa. La estrategia para dicha vuelta resultó efectiva. La velocidad del
mexicano hizo que en cada contra lograra llegar a lastimar a su rival. Alvarado
siguió mostrándose lento, pasivo y con pocas ganas de gastar combustible en
combinaciones de golpes encadenados. Fue otro round para Dinamita.
El round cuatro mostró un leve cambio. Alvarado intentó con algo más
de frecuencia sus arremetidas. Si bien siguió fallando con su derecha, cuando
trataba de filtrar una bomba, su jab izquierdo encontró el rostro de Márquez en
varias oportunidades. Dicho esto, cabe destacar que el mexicano se llevó el
round porque cuando trabajaba de contra seguía llegando con certeza, sus
ataques fueron más contundentes (las combinaciones con golpes enlazados seguían
vigentes) y, como decía, Alvarado quedaba muy expuesto en su yerros de derecha.
La mejoría mostrada en el round 4 se vio frustrada en el siguiente, rueda
en la que Márquez mostró un dominio abrumador. En estos 3 minutos, hubo bastante
pelea en la corta distancia y allí “Dinamita” hizo gala de su técnica,
castigando el rostro con sus velocísimos ganchos, e impactando no menos de 5
ganchos izquierdos a una zona hepática muy desprotegida.
Los rounds 6 y 7 fueron para Márquez. El mexicano siguió imponiendo su
velocidad y contundencia a la hora de, hacer fallar a su rival con la derecha,
e impartir sus impactantes combinaciones. La zona hepática siguió siendo
castigada y se vieron 6 minutos de un gran boxeo por parte de Dinamita.
En el 8vo asalto llegaría la primera gran emoción de la noche. Fue el
primer round donde Alvarado pudo imponer sus golpes, más propio de un visible
round de descanso por parte de Dinamita, que de su propia acción. Pero lo
cierto es que sobre los segundos finales del round, Márquez con su 1 y 2, mandó
a la lona a su oponente tras un demoledor derechazo que encontró con la guardia
baja a su rival y dio de lleno a la faz de Alvarado.
Ante el visible mareo del estadounidense al levantarse, algunos se
habrán atrevido a dar por sentenciada la historia en el noveno round. Sin
embargo, la pelea tendría guardada una sorpresa para todos. Alvarado siguió
buscando con la mencionada pasividad y sus limitaciones para prevalecer sobre
su rival. Así y todo, por fin su derecha, promediando el primer minuto del
asalto, encontró por primera vez con la defensa baja a Márquez, dando de lleno
a su mentón. Producto del golpe, el
mexicano visitó la lona. Lejos de salir alocado a volver a tumbar a su rival,
Alvarado no tuvo mejor idea que ceder la iniciativa. Márquez, herido en su
orgullo, ofreció su mejor versión. Yendo al frente, ofreciéndose para “palo por
palo”, golpeó sin misericordia el rostro del púgil yanqui, abriendo una herida
en el ajetreado pómulo izquierdo de su contrincante. No obstante, por la caída,
Alvarado marcó 10-8 en las tarjetas.
En el siguiente asalto se dieron un respiro. Alvarado para proteger su
herida y Márquez para recuperar algo del combustible quemado en los últimos 2
minutos del anterior round. El 10mo fue para Dinamita, quien con la receta de
algunas combinaciones se llevó la vuelta, ante un pasivo rival.
Los 2 últimos rounds mantuvieron la tendencia. Márquez se bastó de su
velocidad y la claridad de sus golpes, para ganar sobre un Alvarado que no tuvo
respuestas físicas ni boxísticas para ir al menos por el tiro del final.
118-108 marcó mi tarjeta personal. Márquez dejó una imagen positiva
para ahora esperar el ansiado quinto choque de la saga de enfrentamientos contra
el filipino Manny Pacquiao.
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