Kovalev retuvo su título con otro KO

Sergey Kovalev le ganó a Blake Caparello por knockout técnico en el segundo asalto y defendió con éxito su corona mundial de los semipesados OMB. El ruso, a pura potencia, le quitó el invicto al australiano, que se llevó la primera vuelta, pero fue incapaz de aguantar el poder del campeón. El próximo rival de The Krusher será el veterano Bernard Hopkins.

Se dice que Atlantic City está en graves problemas económicos, que sus hoteles y casinos pierden dinero, y que necesita alguna atracción de lujo para atraer público y volver a llenar de billetes sus arcas. Anoche, la ciudad costera encontró lo que necesitaba: Sergey Kovalev. Por segunda vez allí, el ruso puso en disputa su título mundial, que ganó en agosto del año pasado en Gales ante Nathan Cleverly. Sin embargo, no pareció una pelea por un cinturón. El campeón se encargó de que a Blake Caparello, rival de turno, se lo pueda adjetivar con un único término, víctima.

En la previa de Todo Boxeo (Kovalev-Caparello), se anticipó que The Krusher se mediría ante un australiano con poco poder de fuego y de golpes ligeros, pero con mucha movilidad. La clave de la pelea sería el cuerpo a cuerpo: si se daba, Kovalev saldría beneficiado; si no, Il Capo sería el favorecido. No obstante, el retador no lo entendió así. Pese a medir diez centímetros más, no conservó las distancias y desde el arranque se animó al intercambio con el europeo.

Y la primera vuelta le dio la razón a Caparello. Con coraje, el oceánico fue al choque y logró conectar una entrada con su izquierda en el rostro del ruso, que tocó la lona con su rodilla y no pudo evitar el conteo de la referí Sparkle Lee. Sorpresa en el hotel Revel. Aunque se levantó rápidamente y sin mayores resabios del golpe, el knockdown del Triturador implicó que Il Capo se llevase por 10-8 el episodio inicial.

En el segundo round, Kovalev, disconforme y enojado por lo ocurrido, imprimió una vehemencia aún mayor a su forma de boxear. A los pocos segundos, una derecha al vientre puso de rodillas al australiano, que nunca podría recuperarse por completo. Se levantó, pero sin aire para desarmar la guardia e impactar sobre su rival. The Krusher notó el momento de vulnerabilidad y pisó aún más el acelerador. Una lluvia de golpes con ambas manos cayó sobre la humanidad de Caparello, a quien Lee le contó otro knockdown por sujetarse de las cuerdas antes de decretar el KO técnico.

El campeón ruso estiró su invicto profesional a 25-0-1 (23 KO) y sumó su 13er triunfo por la vía rápida consecutivo. Ahora, irá por la unificación de los títulos ante Bernard Hopkins (55-6-2, 32 KO), monarca semipesado de la FIB y supercampeón AMB. El combate sería en noviembre en Atlantic City o Nueva York. Pese a los 49 años del Alien, será una gran prueba para Kovalev, el noqueador.