27 de julio de 2013: Chaves pierde el título mundial interino wélter AMB frente a Keith Thurman |
Luego de superar el retraso de su visa, producto de un problema del consulado norteamericano a nivel global, este sábado Diego "La Joya" Chaves podrá enfrentar finalmente a Brandon Ríos, en pelea pactada a 10 rounds.
La derrota frente a Keith Thurman fue dolorosa, el izquierdazo al hígado fue letal y el hasta entonces campeón mundial interino no pudo resistir más, su boxeo se desvaneció inevitablemente y cayó por KO en el décimo, sin aire. La Joya volvió a subirse a un ring en febrero de este año para enfrentar a Juan Alberto Godoy, por el wélter FIB latino, que se encontraba vacante.
Godoy estuvo muy por debajo del nivel que requiere este tipo de contienda y de un contrincante como Chaves. De todos modos, Diego le ganó con muy poco, pero recibió golpes innecesarios por conexiones que el mismo Chaves facilitó al oponente, al tirar varias manos de forma desprolija y descuidada. La Joya se quedó con el título en el tercer asalto por KOT luego de aprovechar su dominio en los golpes largos al rostro, que abrumaron a Godoy y alentaron al árbitro a intervenir con justa piedad.
Ahora, Chaves chocará con un adversario que está a un abismo de distancia de aquel deslucido Godoy. Brandon Ríos, otro de los pupilos del entrenador de campeones Robert García, es un luchador potente y capaz de resistir mucho castigo, dos ventajas que sabe optimizar, dentro de sus actuaciones generalmente irregulares. Su último combate, con el legendario Manny Pacquiao, lo mostró como un boxeador con muy pocos argumentos, sin capacidad de adaptar su estrategia dentro del ring, pero le sirvió seguramente para aprender de esos errores. Sus mejores virtudes las mostró en sus encuentros con Mike Alvarado (primero, le ganó por KOT 7; luego, perdió por DU), cuando sacó a relucir lo que tiene de mexicano: golpes fuertes y buscar siempre el cruce, ganador en el ida y vuelta, absorbió el daño y castigó, se la bancó en su baldosa y aprovechó los espacios cortos. Para superarlo, Diego está obligado a mantener distancia y aprovechar aquella versatilidad que lo destaca para conectar rápidamente desde una posición más segura. El golpe que le asestó Thurman no fue por una imprudencia de La Joya, que en ese momento estaba mantenía la guardia en alto, fue la precisión y velocidad del boxeador yanqui, su mérito principal. Esas piñas trágicas que tiene el boxeo son decisivas y no se puede debatir mucho más al respecto, ahí no había nada para mejorar del lado del argentino, pero esa guardia es la misma que descuidó contra Godoy, mucho más confiado y "apresurado" por la calidad del oponente.
Tanto Ríos como Chaves llegarán tras peleas en las que no pudieron demostrar su mejor boxeo. En el caso de La Joya, fue un impedimento propio, pero dio la sensación de que subió al ring con la intención de "apurar el trámite"; en cambio, Ríos enfrentó a un Pacquiao que buscaba en ese entonces recuperar el nivel luego de las derrotas frente a Timothy Bradley y Juan Manuel Márquez. Ahora, tendrán la oportunidad de redimirse en Las Vegas, con los guantes bien puestos.
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